El magnetismo ¿En qué consiste?
Decimos que
sabemos lo que son los imanes, ¿pero somos realmente conscientes de lo que
significa el magnetismo?
Probablemente la aplicación más conocida y clásica en la que nos beneficiamos
de las fuerzas magnéticas es la brújula. Al final, incluso nuestra propia
tierra es un gran imán. De hecho, el fenómeno de la atracción magnética se
descubrió por primera vez en Grecia. En la ciudad de Magnesia se observó en
piedras desde el año 500 aC y fue descrito por Tales de Mileto. La ciudad le
dio su nombre al magnetismo como consecuencia.
Con un fenómeno tan fascinante, no es sorprendente que haya sido investigado en numerosas ocasiones a lo largo de los años. Sin embargo, faltaba claridad sobre la diferencia y la conexión entre la electricidad y el magnetismo. No fue hasta 1864 que el físico James Clerk Maxwell estableció oficialmente las ecuaciones de Maxwell, que describen matemáticamente los campos eléctricos y magnéticos.
¿Cómo funciona el magnetismo?
Hay varias
formas de magnetismo: diamagnetismo,
paramagnetismo y ferromagnetismo. El ferromagnetismo (hierro viene de la
palabra latina ferrum) es la forma magnética más común en nuestra vida
cotidiana. Las interacciones electromagnéticas son responsables de este
fenómeno. Las líneas de campo resultantes, que forman el campo magnético, no
son visibles, pero puede aclararlas con limaduras de hierro o registrarlas
gráficamente para poder explicar visualmente el magnetismo.
Existen los llamados imanes permanentes que se magnetizan constantemente, al igual que los electroimanes. En este último, el efecto magnético es provocado por la influencia externa de la electricidad. Si se apaga el flujo de corriente, el magnetismo disminuye. Esto sucede más rápido o más lento dependiendo del material, y la fuerza magnética resultante se llama remanencia.
Las corrientes
eléctricas que proporcionan el magnetismo a los imanes permanentes se deben al
movimiento de los electrones en los átomos. Por un lado, estos giran en órbitas
y, por otro, sobre sí mismos. La combinación de este movimiento puede dar lugar
a un momento magnético, pero esta es una explicación muy simplificada.
Como puede ver, hay diferentes tipos de imanes, cada uno de los cuales tiene diferentes propiedades y modos de operación. Los imanes se usan en muchas áreas diferentes, en motores eléctricos, televisores, altavoces u otros dispositivos electrónicos, lo que también significa que no todos los imanes son igualmente adecuados para cada aplicación. Por lo tanto, siempre debe obtener suficientes consejos para asegurarse de elegir el imán más adecuado para sus necesidades. Si tiene alguna pregunta, no dude en ponerse en contacto con nuestro personal especializado. Le informaremos y lo ayudaremos gustosamente sin compromiso.