acero que pueden dañar maquinarias y equipos costosos.
En el sector de la minería, el mineral se obtiene mezclado con otros productos metálicos. Situación que puede provocar daños en la maquinaria utilizada para extraer el mineral. Por este motivo, se introducen imanes fuertes en puntos específicos de la maquinaria, para evitar daños en el momento del transporte de la sustancia y garantizar una correcta extracción del material, separándolo de los productos metálicos.

También, en etapas de fresado del material, debemos proteger los equipos con imanes para reducir los riesgos en el proceso. Para obtención de minerales más finos y sensibles a la contaminación del producto, como la sal o el cuarzo, se debe liberar el mineral de sustancias metálicas, para aportar la máxima pureza de este material.

El mineral en forma de polvo obtenido en la extracción se debe procesar y separar de todas las partículas metálicas, para un correcto mantenimiento de los equipos y un alto nivel de pureza. Sistemas magnéticos como tambores, filtros o separadores son los encargados de separar y filtrar estos minerales.

En los últimos años ha aumentado la demanda de este tipo de imanes para la separación de partículas metálicas , a causa de la escasez de ciertas materias primas y del aumento de los costes de vertido de residuos. Factor que ha generado un incremento del reciclaje.

El sector del reciclaje también tiene la necesidad de separar la materia a aprovechar de los elementos metálicos. Cuanto mayor sea la cantidad de carbono en estos productos, más propiedades magnéticas tendrán y más fácil será de separar. Algunos de los imanes más utilizados en este sector son los electroimanes, con la ventaja de activar y desactivar su campo magnético. Los podemos encontrar en la primera clasificación de desperdicios.